viernes, 12 de octubre de 2012

PESADUMBRE


Hoy escribo desde un lugar poco habitual, bueno, podría decir que escribo en mi lugar de trabajo, en mi nicho, en donde me puedo refugiar de las masas, de las tareas, clases, compañeros y hasta alguno que otro problema personal.

Te hablo de que en algunos momentos, sea cual sea en el momento que te sientas frustrado ya sea porque dijiste una palabra, aunque sea una sola palabra, que implique todo lo que sientes por esa persona, en la cual has convivido durante muchos años y la dices en el momento menos oportuno por un conjunto de acciones que te han llevado debido a tu estado interno.

Ahora bien, terminas la conversación, te das media vuelta y en poco tiempo te das cuenta que la has cagado, estas reaccionando inusualmente a como estabas acostumbrado a tratar algunas situaciones acaloradas, hasta podría decir que te entra el remordimiento hasta el punto de sentirte como la misma mierda.

¿Y ahora que es lo que haces? Te refugias en tu nicho, en tu estado interior, en un mundo fantasioso en donde piensas que no has actuado de esa manera, ya que muchas veces somos nobles en la teoría y débiles en la práctica y dependiendo de las acciones que hagamos, es a la larga como nos sentiremos y que es lo que en realidad proyectemos en nuestro entorno.

Puedes proyectar desde ser una persona tímida y retraída, como Woody Allen hasta el punto de ser un hijo de puta y cabrón de mierda como Clint Eastswood, pero al final el remordimiento de conciencia de lo que haces esta ahí, ya que cada uno de ellos lo gestiona de manera distinta, el primero se reprime aún mas, ya que no esta acostumbrado a pedir lo que desea y ni a reclamar lo que merece; y por el otro lado el otro le viene valiendo un pepino rozando la indiferencia, con lo cual no se siente encontrado con esos sentimientos.

Si has hecho algo que pudo haber perjudicado a cualquier persona, sea cual sea, amigo, hermano, padre, novi@  y hasta tu mismisima madre, lo unico que te queda por hacer es pedir disculpas y seguir con tu vida.



sábado, 6 de octubre de 2012

REDENCIÓN



A quien no le ha sucedido que en algún punto de tu vida todo a tu alrededor, absolutamente todo ves como se desmorona a pedazos, ya sea tu teléfono, computadora, relaciones, creencias que has puesto en practica durante mucho tiempo y que estas cuestionando cada una de ellas.
Sientes como todo eso que forma parte de ti, como tus actividades diarias, relaciones laborales, familiares y afectivas se alinearan para ponerte todo en contra. Todos y cada uno de esos ámbitos de tu vida hacen que se tornen de manera negativa porque lo más probable es que:
  • Tu plan de juego esta fallando
  • Haz hecho un sinnúmero de errores que te han llevado a ese resultado poco deseable.

Si en algún momento vez que tienes a tu alrededor muchos aspectos de tu vida dañados es momento de repararlos, poco a poco, desde lo más sencillo a lo más complejo. Y te lo digo porque si intentas repararlos todo de un solo golpe es porque estás desesperado, cosa que no te recomiendo.

Verás también que la cosa esta muy jodida y lo único que te importa es mandar todo a la mierda, ya que no has encontrado la solución de uno varios problemas de tu vida. Además de que puedes quedarte en casa, acostado en tu cama sumergido en pensamientos caóticos que no te llevarán a ningún lado, viéndote como una putita llorona o te levantas y peleas.

Te hablo de ser valiente, dejar de lado tu reactividad, egoísmo y soberbia cambiándola por la serenidad, nobleza y caballerosidad que ha dentro de ti.

Pelea con eso, no hay nada mas admirable que ver a una persona peleando con esos valores y deje su hijoputez de lado, ya que el único instante que lo dejamos y lo he visto algunas veces es en el lecho de muerte de algún conocido, pidiendo perdón a todos los que han hecho daño y quejándose con resentimientos que les debieron haber hecho a lo largo de sus vidas.

Y e el caso de que hayas hecho alguna hijoputez, sean cuales sean y que hayan afectado a varias personas, la mejor manera de que olvides todo es redimirte contigo mismo, no buscando la validez de ellos y en caso de que te perdonen ya cae en cada uno de ellos.

Y si has llegado al final querido lector, te diré que es muy posible que te encuentres en tu hora más oscura, aquella en donde te puedes perder de lo que en realidad deseas por el resto de tu vida. Solo recuerda cuando no estamos en tranquilidad absoluta, se nos olvida algo tan sencillo como encender la luz.